POZO DE ALMAS: UNA NOCHE EN " EL CASTILLO DE LOS LAMENTOS" MOTA DEL MARQUÉS

domingo, 16 de febrero de 2014

UNA NOCHE EN " EL CASTILLO DE LOS LAMENTOS" MOTA DEL MARQUÉS

En la tarde del 8 de Octubre del 2011, una nueva aventura de investigación me esperaba en compañía de mis amigos del grupo GAIPO.
Abandonábamos tierras asturianas, rumbo Valladolid, en concreto al maravilloso pueblo de Mota del Marqués.
Allí nos aguardaba la aventura y el misterio, ya que pasaríamos noche entre las ruinas del castillo y la iglesia que se alzan de forma majestuosa en una colina sobre el pueblo de Mota del Marqués.
El motivo del viaje entre otros verificar que había de cierto en las leyendas que hablan del lugar, ya que según cuentan varios testigos, durante la noche se escuchan lamentos y ladridos de perros que proceden de la torre del homenaje de dicho castillo.
Cuentan que el origen de estos lamentos se debe a un nigromante que fue encerrado como castigo en dicho castillo, donde pereció. Pero antes de hacerlo maldijo a todos los habitantes de Mota del Marqués y al pueblo entero.
Al llegar al pueblo de Mota, la noche nos cubrió con un cielo cargado de estrellas y una preciosa luna, las calles casi desiertas, sin apenas vecinos nos recibían, sacamos el equipo del coche y comenzamos nuestro ascenso por la colina rumbo a la misteriosa Torre del Homenaje...

Silencio... apenas interrumpido por los ladridos de los perros de alguna casa, que al pasar quizás advertían a aquellos viajeros acerca de lo que se podían encontrar...
Detuvimos nuestros pasos por un momento para contemplar a un lado del camino las ruinas de la iglesia, que aun conservaba el esplendor y la majestuosidad que en un tiempo tuvo, iluminada por la luna parecía bañada en un halo de magia y msticismo.
Personalmente su visón me dejó embriagado durante unos minutos, pero ya habría tiempo de volver a lo largo de la noche... arriba en lo alto de la colina nos esperaba imponente con su silueta recortada, la Torre del Homenaje.
Quien sabe si con algun visitante en su interior esperando nuestra llegada...
El ascenso lento, por el material que transportábamos y el viento y frío que comenzaban a hacer acto de presencia, no nos desanimó sino que hizo aumentar nuestras fuerzas y energias con más intensidad.
Al coronar la cima de la colina, no pudimos evitar dirigir nuestros rostros hacia la enorme construcción, allí estábamos por fín, ávidos de encontrar respuestas y desentrañar misterios.
Comenzamos a supervisar el material, realizar las primeras imágenes fotográficas del lugar, y para prevenir ya que el lugar tenía bastante carga negativa , David llevó a cabo un ritual de protección dibujando en el suelo un símbolo protector por si llegado el momento tuviésemos que protegernos en él....

Las sorpresas no se harían esperar, ya que mientras que estábamos revisando el equipo, la cámara de David colocada sobre el trípode cayó de forma estrepitosa al suelo....
¿ Acción del viento? ¿ Desnivel del terreno?
Lo raro del hecho es que estaba colocada de forma perfecta y a pesar de que hacía viento este no era tan fuerte como para tirarla al suelo junto con el trípode.
Nuestra sorpresa sería grande cuando al mirar unas fotos que había tomado antes del suceso, pudimos comprobar que en una de ellas, se podía apreciar una extraña silueta cerca del lugar donde la cámara había caido, que parecía observarnos.
Tras varios barridos alrededor de la torre con cámaras infrarojas, decidimos bajar a la iglesia en ruinas ya que el frío y el viento habían aumentado su intensidad.
Así pues iniciamos el descenso para refugiarnos del gélido viento entre los muros de aquel templo sagrado.

Tras la cena, un grupo de nosotros volvimos de nuevo a subir a la Torre del Homenaje, donde llevamos a cabo varias psicofonias con laesperanza de obtener algún resultado.
De nuevo algo " jugaba " con nosotros ya que tras varios intentos, escuchamos repentinamente un grito, que se repitió en dos ocasiones más aunque de forma menos intensa, cuando preguntamos a esa supuesta entidad que volviera a manifestarse...
El cansancio y el frío iba haciendo mella en nuestros cuerpos por lo que alrededor de las cuatro menos cuarto de la madrugada aproximadamente abandonamos el lugar en dirección al coche, cual no sería nuestra sorpresa cuando al llegar a la parte alta del pueblo un nuevo grito nos hizo dirigir de nuevo nuestras miradas a la sombría torre... tras el mismo de repente dos árboles próximos a nosotros comenzaron a mecerse repentinamente de forma casi violenta por el viento, el cual al atravesarlos parecía darnos un oscuro mensaje...
¿ Una forma de despedirse quizás de aquellos aventureros?
¿ O tal vez una advertencia, diciéndonos que no regresáramos?
El caso es que aquel lugar, y aquel pueblo Mota del Marqués, quedará grabado en mi archivo de la memoria, como un grato recuerdo, compartido con personas tan maravillosas como lo son los miembros del Grupo GAIPO.